¿Por qué algunos especialistas sugieren que es mejor invertir en plata que en oro?
Las últimas tres veces el crecimiento de la plata superó al oro por entre 60 a 302 puntos de porcentuales en los próximos dos o tres años
Desde principios de este año, Pro Aurum, uno de los comerciantes líderes de metales preciosos a nivel mundial, ha registrado una creciente demanda de plata.
Una de las razones clave para esta tendencia ha sido la alta proporción entre el valor del oro y la plata, según el director de la empresa, Robert Hartmann.
"La plata está altamente subvalorada en comparación con el oro y otros metales preciosos", señaló Hartmann, citado por Manager Magazin.
Actualmente la proporción entre el valor del oro y la plata ha llegado a un nivel que habitualmente supone significativos cambios históricos. Este indicador es calculado simplemente dividiendo el precio del oro por el precio de la plata. Actualmente el ratio es de aproximadamente 78,6.
Pero este mes el indicador ha superado los 80 puntos, algo que sucedió en 1995, 2003 y 2008, y en cada ocasión, posteriormente la proporción cayó por debajo de 80. En consecuencia, en cada oportunidad, los precios de la plata crecieron.
"Las últimas tres veces [el crecimiento de] la plata superó al oro por entre 60 a 302 puntos de porcentuales en los próximos dos o tres años", informó Bloomberg.
Entre 1995 y 1998, los precios del oro perdieron un 24%. Luego, cuando el oro creció el 105%, la plata saltó el 407%.
Y este año, los precios del oro han vuelto a crecer tras varios años de caída libre: desde enero el oro ha ganado un 15%.
En ese sentido, la plata también ha reanudado su crecimiento. Por lo tanto, considerando la historia de la proporción entre estos dos metales, los inversores deben tomar en cuenta que en un futuro próximo, la dinámica de la plata podría superar la del oro, recalca Manager Magazin.
Otro argumento a favor de la plata es la apreciación de los títulos de las compañía fabricantes de plata a diferencia de las acciones de los productores de oro, según subrayó el analista Martin Siegel.