El Gobierno de Argentina prohíbe a la petrolera YPF realizar operaciones internacionales
El Gobierno argentino ha prohibido a la empresa Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF), que posee cerca del 60% del mercado de ese país y controlada desde 1999 por la española Repsol, cualquier exportación o importación de crudo hasta que pague una deuda tributaria de 8 millones de dólares.
La suma es requerida por el impago de los derechos de exportación de gas. La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) aplicó la sanción a la compañía por el impago de la deuda, correspondiente a cargos por "una diferencia" en derechos de exportación de gas, precisaron los portavoces del organismo sin brindar más detalles.
En los últimos tiempos las autoridades de Argentina exigen que las compañías inviertan más para detener la caída de las reservas. A finales de enero en la prensa local apareció la información de una posible nacionalización de la compañía hispano-argentina YPF, nunca confirmada ni desmentida por el Gobierno argentino.
Esto sucede en medio de la fuerte presión gubernamental sobre las petroleras. En total, hay más de 300 empresas exportadoras e importadoras que serán sancionadas por tener diferencias con el fisco y no haber regularizado su situación, aunque el monto que adeuda YPF es el más grande.
"La política energética confronta con transnacionales"
Varios expertos creen que Argentina quiere evitar el envío de sus recursos al extranjero. Así, el profesor de economía política Julio Gambina consideró en una entrevista para RT que en el país ahora existe un conflicto con las compañías transnacionales, que controlan el mercado energético del país.
"Lo que Argentina está discutiendo tiene que ver con la capacidad de resolver la crisis energética que el propio país tiene. Este año 2012 requiere un control de los reflujos económicos para inducir a que las empresas petroleras inviertan en exploración y explotación para disminuir el gasto que la Argentina tiene para resolver el déficit energético", señaló el experto.
El profesor de economía política opinó que Buenos Aires intenta restablecer el control en el ámbito energético, afectado por las actividades de las petroleras internacionales. "En Argentina en el comienzo de 2012 todo se presenta como un conflicto de una política energética que confronta con transnacionales que manejan el mercado energético en Argentina", subrayó Gambina.
La española Repsol YPF SA posee una participación mayoritaria en YPF, pero la administración está en su mayoría en manos de la familia argentina Eskenazi, que posee un 25% de la empresa a través de su 'holding' Grupo Petersen.