La Biblioteca Nacional Széchényi (OSZK) en Budapest, Hungría, cuenta con una rica colección de materiales dedicados a la I Guerra Mundial. Las reproducciones de una parte de carteles, tarjetas postales y fotografías han sido recientemente publicadas en el libro 'Imagina la Gran Guerra' de los investigadores de la OSZK Anikó Katona y Anita Szarka.
En las imágenes en color aparecen reflejadas las nuevas tecnologías de aquella época: Metralletas, tanques, aviones, gases tóxicos y otras armas. En varias carteles aparece un hombre manco con una prótesis biomecánica.
"La propaganda en carteles apareció en Europa occidental en los años 1870 y floreció por primera vez durante el período art nouveau en los inicios del siglo XX" explica el libro. "En la decada de 1910 políticos reconocieron el potencial de este medio que anteriormente había sido una mera herramienta comercial, explican los autores.
Nuevas obras del género aparecieron durante la I Guerra Mundial. "La vida en los campos de batalla se presentaba como una emocionante aventura para los hombres. Los artistas pintaban a soldados durante actividades tranquilas como preparación de comida, pausas de café o lectura de periódicos. Los enfrentamientos se reflejaban de manera diferente" explican los autores del libro.