México y Venezuela, ¿ante una crisis diplomática?: Caracas llevaría el caso Ayotzinapa a la OEA
Después de que el canciller mexicano Luis Videgaray hiciera un llamamiento a ''actuar con urgencia'' ante la situación política que aqueja a Venezuela, su homóloga del país sudamericano, Delcy Rodríguez, respondió con dureza, criticando a México por las violaciones de derechos humanos en el país, como la desaparición de 43 estudiantes de la normal rural de Ayotzinapa en septiembre de 2014.
Según el semanario 'Proceso', la canciller venezolana arremetió contra su homólogo mexicano, al que acusó de no tener vergüenza por denunciar la situación en Venezuela y al que recomendó fijarse más en su país, antes de hacer declaraciones sobre otros países.
En medio de estos dimes y diretes, que podrían derivar en un conflicto diplomático entre los dos países latinoamericanos, la canciller venezolana lanzó incluso una invitación a su homólogo para sostener un debate en la próxima sesión ordinaria de la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) que se llevará a cabo en la ciudad mexicana de Cancún.
''Lo llamo a un debate público, en Cancún, vamos a debatir sobre democracia, sobre derechos humanos, sobre delitos. Vamos a debatir sobre violencia", dijo Rodríguez'.
Es lamentable que el gobierno de México agreda a pueblos latinoamericanos y viole grave y masivamente los DDHH de su propio pueblo
— Delcy Rodríguez (@DrodriguezVen) 31 de mayo de 2017
Las tensiones
Durante la reunión de Cancún, Venezuela pretende hacer oficial su retiro de la OEA.
México encabeza un grupo de 15 países de continente que en foros de la Organización de Estados Americanos acusan a Nicolás Maduro de crear un clima de "desconfianza" y de "crisis política".
Además, junto con EE.UU. y Perú, México buscó la redacción de una declaración para instar a Maduro de abandonar el proyecto de Asamblea Constituyente durante una reunión de cancilleres del continente que, finalmente, no se dio.
Contrastes
El asesinato de periodistas, la subida en los precios de los combustibles y el hallazgo de fosas clandestinas en diferentes partes del país son el exponente de una grave crisis de derechos humanos en México.
Desde la declaración de guerra contra el narcotráfico hecha por el entonces presidente conservador Felipe Calderón en 2006, han muerto más de 100.000 personas, mientras que alrededor de 30.000 se encuentran desaparecidas.
Sin embargo, no fue hasta 2014, con la desaparición de 43 estudiantes, supuestamente a manos de policías locales del sureño Estado de Guerrero, que la imagen del actual mandatario Enrique Peña Nieto cayó a mínimos históricos y mostró la grave situación de país ante el mundo.
Por su parte, Venezuela vive fuertes enfrentamientos entre oposición y oficialismo que han dejado ya 65 víctimas fatales. La lenta recuperación de los precios del petróleo alienta la precariedad económica por la que atraviesa la población del país sudamericano.