La Unesco declara Hebrón patrimonio mundial palestino y provoca la ira de Israel y EE.UU.
La Unesco ha decidido este viernes incluir al casco histórico de la ciudad cisjordana de Hebrón en su lista de lugares Patrimonio de la Humanidad en Peligro. Lo ha hecho registrándolo como Palestina, lo que ha provocado la indignación de Israel y EE.UU.
En el nuevo lugar protegido por la agencia de Educación, Ciencia y Cultura de la ONU se encuentra el lugar sagrado conocido por los musulmanes como la mezquita de Ibrahim y para los judíos como la Tumba de los Patriarcas. Con esta designación la Unesco evaluará anualmente la situación en el casco histórico de esa ciudad, que está situada en la zona ocupada por Israel.
Además, permite la asignación inmediata de ayuda del Fondo del Patrimonio Mundial para garantizar la salvaguardia de los sitios en peligro de extinción, los cuales están reconocidos por la comunidad internacional como de "valor universal excepcional". La zona vieja de Hebrón se convierte en el tercer sitio de Patrimonio de la Humanidad registrado como Palestina desde que la Unesco la reconoció como Estado en el 2011.
La respuesta de Israel
Por su parte, Tel Aviv ha condenado esta resolución calificándola de "delirante". "Esta vez decidieron que la Tumba de los Patriarcas en Hebrón es un sitio palestino, lo que quiere decir no judío", lamentó el primer ministro israelí Benjamín Netanyahu. Asimismo el Gobierno de este país ha respondido recortando otro millón de dólares de los fondos que aporta a Naciones Unidas.
Es la cuarta vez en los últimos meses que Israel reduce la financiación al organismo internacional, al que había castigado por resoluciones que afectaban a sus intereses. Hasta diciembre del año pasado Tel Aviv contribuía con 11,7 millones anuales a la ONU, pero tras este último recorte ahora solo aportará 1,7 millones de dólares.
EE.UU. también ha criticado la decisión de la Unesco, tildando su resolución de "trágica" y de "afrenta a la historia". La embajadora estadounidense ante la ONU, Nikki Haley, advirtió que Washington está revisando sus relaciones con esa agencia de Naciones Unidas.