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"Día triste para el fútbol": Conmebol condena disturbios antes de la final de la Copa Libertadores
Fuertes enfrentamientos se produjeron entre los aficionados y la Policía en los alrededores del Estadio Monumental.
El presidente de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), Alejandro Domínguez, ha condenado a través de su cuenta en Twitter la violencia que se desató este sábado cerca del Estadio Monumental, donde River Plate y Boca Juniors debían disputar el partido de vuelta de la final de la Copa Libertadores de América.
"Un día triste para el fútbol sudamericano", indicó Domínguez y expresó su solidaridad con todos los afectados por los hechos. "Lo que debió ser un encuentro deportivo para vivir, disfrutar y compartir lo mejor del fútbol sudamericano se convirtió en una vergüenza", precisó el presidente del organismo.
Ha condenado las acciones "violentas y criminales" que pusieron la vida de muchas personas en riesgo y "afectaron a millones de aficionados" y "avergonzaron" no solo a un club concreto, sino a todo el país y el continente. En ese contexto, Domínguez instó a las "autoridades competentes" a que tomen las medidas para "identificar, capturar y judicializar a los responsables" e indicó que "estos hechos no pueden quedar impunes". "Todo el peso de la ley y el rechazo de la sociedad" deben caer sobre las personas involucradas en las acciones agresivas, subrayó.
Una final en paz
Además, el presidente de la Conmebol exigió que se refuercen las medidas de seguridad y que se redoblen los esfuerzos que vigilan y garantizan el orden público para que la situación que tuvo lugar este 24 de noviembre no se repitiera durante la final de este domingo.
"La Conmebol hace un llamado a que este domingo se viva una final en paz, con respeto por el rival y mostrando la mejor cara de Sudamérica al mundo", subrayó. Al mismo tiempo pidió a los actores del fútbol en América del Sur que unen sus esfuerzos para determinar y combatir los factores que causan la violencia y "cada año manchan" el fútbol en el continente.
Fuertes enfrentamientos ocurrieron en Av. Libertador y Monroe, cerca del Estadio Monumental, entre policías y aficionados del River, quienes lanzaron piedras a las fuerzas del orden y estas respondieron con balas de goma y gases lacrimógenos. Hasta el momento al menos 30 personas han sido detenidas.
Por su parte, los directivos del River Plate y Boca Juniors han confirmado que la final de la Copa Libertadores de América, que debía celebrarse este 24 de noviembre en el Estadio Monumental, ha sido suspendida hasta este domingo debido al vergonzoso ataque sufrido por los jugadores 'xeneizes', cuando iban en el autobús del club rumbo al estadio, por parte de los aficionados del equipo rival.
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