El subsecretario para la región de América Latina y el Caribe de la Secretaría de Relaciones Exteriores de México, Maximiliano Reyes Zúñiga, señaló que su país está dispuesto a participar como mediador en las crisis políticas de Venezuela y Nicaragua.
Durante su comparecencia ante la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado mexicano, donde fue ratificado en su cargo, Reyes dijo que en el caso de Venezuela, la nueva administración mexicana, que preside Andrés Manuel López Obrador, mantendrá una adecuada interlocución con el gobierno en turno y con todos los actores de la sociedad venezolana.
"Que quede claro, México está en plena disposición de fungir como puente de diálogo y mediador de los conflictos internos de ese país, si así es requerido", enfatizó el político, añadiendo que "la situación humanitaria por la que atraviesa ese país merece tanto el análisis de sus causas y efectos y, sobre todo, la atención solidaria".
Por su parte, al referirse a Nicaragua, donde el año pasado hubo protestas contra el Gobierno de Daniel Ortega, señaló que México estaría en disposición de participar, a invitación de Nicaragua, "en todo mecanismo de facilitación y mediación del diálogo que permita el acercamiento de las partes en conflicto, con pleno respeto a sus asuntos internos y a su autodeterminación".
Relaciones de respeto
El subsecretario de Relaciones Exteriores señaló que para México "es momento de volver a mirar al sur para consolidar su presencia como un actor regional relevante".
Señaló que las relaciones con los países de la región estarán guiadas "por los principios constitucionales de no intervención, autodeterminación de los pueblos, solución pacífica de controversias, respeto a los derechos humanos y cooperación internacional para el desarrollo".
El pasado jueves, cuando la Organización de Estados Americanos (OEA) discutió y aprobó una resolución que declara ilegítimo el Gobierno de Venezuela, luego que el presidente de la nación suramericana, Nicolás Maduro, se juramentara para un nuevo período que se extiende hasta 2025, México se abstuvo de votar.
El Gobierno mexicano tampoco firmó la Declaración de la reunión del denominado Grupo de Lima, realizada el pasado 4 de enero, en la que determinaron no reconocer la legitimidad del nuevo período de gobierno de Maduro.