Excónsul de Ecuador en Londres: "La estrategia del Gobierno de Lenín Moreno fue de hostigar, de hacerle la vida imposible a Assange"
Fidel Narváez, excónsul de Ecuador en Londres, calificó de "precedente nefasto" contra "los derechos humanos, la libertad de expresión y la integridad de un periodista" la retirada del asilo a Julian Assange, por parte de las autoridades de Ecuador, y su posterior detención por la Policía británica, este jueves 11 de abril de 2019.
En declaraciones a RT, Narváez, quien estuvo en el cargo los primeros seis años que Assange estuvo asilado en la sede diplomática, nombró varias violaciones cometidas a las normativas ecuatorianas por parte de los funcionarios diplomáticos y el actual Gobierno del país suramericano.
En primer lugar, permitir la entrada de fuerzas policiales británicas a la Embajada. Según el excónsul, "el hecho de permitir el ingreso de una fuerza extranjera a una Embajada es algo humillante, denigrante", además, señaló que la Constitución ecuatoriana "prohíbe la presencia de tropas extranjeras en su territorio".
"Todo el mundo ha visto como Julian Assange ha sido arrastrado por la Policía británica, que lo sacó del interior de la Embajada del Ecuador", enfatizó.
Suspensión de la ciudadanía
Otra de la violaciones, según el entrevistado, fue la suspensión, por parte del Ministerio de Relaciones Exteriores de Ecuador, de los efectos de la ciudadanía ecuatoriana que le fue otorgada a Assange en diciembre de 2017.
"¿Cómo puede perder la nacionalidad una persona de un día al otro, sin un proceso?", se preguntó Narváez.
La apreciación del exfuncionario coincide con la posición de la Defensoría del Pueblo de Ecuador, que, en un comunicado emitido este jueves en el que cuestionó la retirada del asilo a Asange, dice que el artículo 81 de la Ley Orgánica de Movilidad Humana establece que debe seguirse un "debido proceso" para la nulidad de la naturalización a un ciudadano ecuatoriano.
Además, cita el procedimiento determinado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), de la cual forma parte Ecuador, para la suspensión de la nacionalidad, como la notificación previa de la existencia de un proceso, tener audiencia, poder ejercer una defensa, entre otros.
Comportamiento de Assange
Entre las razones que esgrimió el canciller de Ecuador, José Valencia, para justificar la retirada del asilo a Asange, nombró su "comportamiento censurable" en la sede diplomática.
"Assange ha exhibido una conducta reprochable", dijo el ministro de Exteriores durante una comparecencia ante la Asamblea Nacional de su país en Quito y señaló que, entre otras cosas, hubo "conductas higiénicas impropias" por parte del activista, así como que jugaba fútbol y patinaba dentro de la Embajada y molestaba a los funcionarios diplomáticos.
Al respecto, Narváez dijo que esas razones "son absolutamente falsas, distorsionadas o exageradas".
"Mientras yo estuve ahí, la estancia de Julian era de mutuo respeto, siempre, de todos los funcionarios diplomáticos, los funcionarios administrativos hacia Julian y de Julian hacia ellos", mencionó.
Sin embargo, señaló que luego, tras el comienzo de la Presidencia de Lenín Moreno, "la estrategia del Gobierno fue de hostigar, de provocar, de hacerle la vida imposible a Julian para que él se quiebre y por su propia voluntad salga de la Embajada".
"Presiones y entreguistas"
Narváez señaló que la decisión del Gobierno ecuatoriano respecto a la retirada de asilo a Assange tiene como motivación que "Moreno no puede resistir la presión externa [...] es un gobierno tembleque".
Entre esa presiones nombró la ejercida por EE.UU., "que quiere la cabeza de Julian". Señaló que eso quedó comprobado este mismo jueves, cuando las autoridades británicas confirmaron que tienen una orden de extradición emitida por Washington contra Assange y que era una de las razones para detenerlo.
Sin embargo, también señala que la presión no fue tan fuerte. Mencionó que en el ADN de "las élites" de Ecuador, que ahora tienen cabida en el Gobierno de Moreno, hay un "colonialismo mental".
"Ellos (las élites ecuatorianas) creen que su papel es ese, de ser serviles, entreguistas con los amos del mundo, con las grandes potencias, entonces no necesitan de tanta presión, son ellos mismos los que quieren mostrarse serviles", argumentó.
Otra de las razones, según Narváez, es la misma que ha señalado WikiLeaks, que es una represalia por haber dado a conocer una trama de corrupción que presuntamente involucra a Moreno y a buena parte de su familia: los INA Papers.
Para el excónsul, es un "escándalo de corrupción que le está poniendo el agua hasta el cuello y (Moreno) tiene que buscar una distracción y un chivo expiatorio y de una vez deshacerse de ese asilo incómodo que era el de Julian".