La UE no acepta los resultados de los comicios en Bielorrusia y prepara sanciones contra "los responsables de la violencia y el fraude" electoral

Alexánder Lukashenko ha sido reelegido como presidente de Bielorrusia con el 80,1% de los votos, mientras que la candidata opositora Svetlana Tijanóvskaya recibió el 10,12 % del apoyo de los electores.

El alto representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, anunció este viernes que el bloque no acepta los resultados de las elecciones presidenciales en Bielorrusia, en las cuales ganó Alexánder Lukashenko, en el poder desde 1994.

"La UE no acepta los resultados de las elecciones. Comienza el trabajo para sancionar a los responsables de la violencia y el fraude", señaló Borrell a través de su cuenta en Twitter.

Los comentarios de Borrell se producen después de una conferencia telefónica de los 27 ministros de Exteriores de la UE, que terminó con un consenso de que las elecciones en Bielorrusia fueron "fraudulentas". "Los ministros reiteraron que las elecciones no fueron libres ni justas. La Unión Europea considera que los resultados han sido falsificados y, por lo tanto, no los acepta", se señala. 

Previamente este viernes, la Comisión Electoral Central de Bielorrusia dio a conocer las cifras finales del escrutinio de los comicios del 9 de agosto que muestran que Alexánder Lukashenko ha sido reelegido como presidente de ese país con el 80,1 % de los votos. Su principal rival y líder de la oposición, Svetlana Tijanóvskaya, recibió el 10,12 % del apoyo de los electores.

Los resultados de estas elecciones provocaron protestas multitudinarias en todo el país que no cesan por el sexto día consecutivo.

Violentas protestas en Bielorrusia

Durante los tres primeros días de las protestas se registraron violentos enfrentamientos entre los manifestantes y la Policía. Los agentes de la ley utilizaron gases lacrimógenos, balas de goma y granadas aturdidoras para dispersar a la multitud, que, a su vez, lanzó fuegos artificiales, palos de madera, piedras y antorchas hacia los policías. 

Según el Ministerio del Interior bielorruso, durante las protestas fueron detenidas unos 6.000 manifestantes, de los cuales más de 2.000 personas ya han sido puestas en libertad. Además, decenas de manifestantes y agentes policiales resultaron heridos.

Este viernes, Tijanóvskaya, quien previamente no reconoció los resultados de los comicios y se refirió a sí misma como ganadora de las presidenciales, anunció la creación de un consejo de coordinación para realizar una transferencia pacífica del poder. En ese contexto, precisó que su oficina está lista para un diálogo con las autoridades del país y se dirigió a la comunidad internacional, pidiendo ayuda en su organización.

Unas horas antes, Tijanóvskaya publicó un video en el que instó a sus seguidores a "defender" su elección en esos comicios y solicitó al Gobierno que detenga la violencia. Actualmente la líder de la oposición se encuentra en Lituania.

A su vez, Lukashenko declaró este miércoles que la mayoría de los manifestantes son personas desempleadas y con antecedentes penales. Además, el presidente subrayó que la "tarea más importante" para las autoridades es ahora "garantizar la seguridad" de los ciudadanos, así como "proteger el orden constitucional y garantizar el funcionamiento normal de los órganos del Gobierno estatales".