Ikea enfrenta una posible escasez de algunos productos a medida que las empresas navieras desvían sus barcos lejos del mar Rojo, mientras que el minorista de ropa Abercrombie & Fitch Co. planea pasarse al transporte aéreo, comunicó Bloomberg el miércoles.
En este contexto, el gigante sueco de los muebles advirtió que está buscando otras opciones para asegurar la disponibilidad de sus productos, muchos de los cuales normalmente pasan por el mar Rojo y el canal de Suez, donde actualmente se enfrentan a la amenaza de ser atacados por los hutíes de Yemen.
"La situación en el canal de Suez provocará retrasos y puede derivar en limitaciones de disponibilidad para ciertos productos de Ikea", expuso Oscar Ljunggren, portavoz de Inter Ikea Group, citado por el medio. Ikea mantiene un estrecho diálogo con los proveedores de transporte "para garantizar la seguridad de las personas que trabajan en la cadena de valor de Ikea y tomar todas las precauciones necesarias para mantenerlas a salvo", agregó.
A su vez, Abercrombie piensa pasar del transporte marítimo al aéreo para evitar interrupciones, según un correo electrónico enviado a sus proveedores y al que tuvo acceso Bloomberg.
Otras compañías navieras globales, incluidas Mediterranean Shipping Co. (MSC), la danesa Maersk, la francesa CMA CGM y la alemana Hapag-Lloyd, suspendieron sus envíos por el mar Rojo.
A medida que los barcos se ven obligados a desviar sus rutas, los costos adicionales (vinculados por ejemplo a los seguros y a las demoras resultantes) plantean riesgos para la economía mundial, enfatiza Bloomberg. Tal situación, forzada por la guerra entre Israel y Hamás, ha creado otra emergencia marítima. Una circunstancia que se produce más de dos años después que el Ever Given, un gigantesco buque carguero panameño que quedó atrapado en el canal de Suez, paralizara el comercio mundial.