Ucrania puede utilizar los cazas F-16 proporcionados por Países Bajos sobre territorio ruso, afirmó el jueves el comandante de las Fuerzas Armadas del país, Onno Eichelsheim, citado por NOL.
"No hemos impuesto ninguna restricción al uso y alcance del F-16, siempre que se respeten las leyes de la guerra", señaló Eichelsheim.
Además, el comandante no se opuso al posible uso de armas neerlandesas en ataques ucranianos contra territorio ruso, tales como la incursión en la provincia de Kursk que calificó de "brillante desde un punto de vista práctico".
"Ucrania puede utilizar los recursos que le proporcionamos como desee", aseguró y agregó que EE.UU. está parcialmente de acuerdo con esto. "Tienen restricciones diferentes, pero también han suministrado otros sistemas de armas. Ciertamente, estamos en la misma sintonía para garantizar que Ucrania gane la guerra. Creo que estamos poniendo todo nuestro esfuerzo para que eso suceda", dijo.
Según Eichelsheim, el ataque es "al menos el comienzo de un posible ajuste estratégico en la lucha entre Rusia y Ucrania", lo que Kiev podría aprovechar. "Se puede utilizar como moneda de cambio, luego hay que hacer algo con las negociaciones", sugirió. "¿O se utiliza para garantizar que Rusia tenga que retirar unidades de la región del Donbass? No vemos que esto último suceda, así que el tiempo nos dirá hasta qué punto tiene un impacto estratégico", añadió.
Por su parte, el ministro de Defensa neerlandés, Ruben Brekelmans, enfatizó que los ataques de Kiev no deben apuntar a objetivos civiles rusos. "Evidentemente, Ucrania no puede hacer eso. Esas son las condiciones que hemos establecido", dijo.
Ámsterdam ha prometido a Kiev un total de 24 aviones de combate F-16, en el contexto de la operación especial militar rusa. Sin embargo, Eichelsheim no comentó cuántos de ellos ya se han desplegado en territorio ucraniano.
Moscú advirtió anteriormente que percibirá el suministro de cazas F-16 a las Fuerzas Armadas de Ucrania como una señal "deliberada" por parte de la OTAN en el ámbito nuclear. El Ministerio de Defensa de Rusia anunció el pasado 16 de julio que quien derribe el primer caza F-16 en el marco de la operación militar especial será premiado con 15 millones de rublos (174.419 dólares).