Detenido el cuarto sospechoso del atentado en Domodédovo
Ha sido detenido el cuarto sospechoso de estar implicado en el atentado en Domodédovo que se cobró la vida de 36 personas y dejó más de 130 heridos.
Bashir Jamjóyev, de la República caucásica de Ingushetia, fue detenido a principios de febrero, según una fuente en los órganos de control del orden público. El 3 de febrero Jamjóyev tuvo un accidente de tráfico y fue hospitalizado. Al revisar su coche, la policía encontró un fusil automático y cartuchos. Jamjóyev fue detenido y en ese momento se descubrió que estaba en busca y captura.
Según los datos de la policía y de los servicios de seguridad, el detenido es uno de los líderes de los comandos clandestinos de Ingushetia. Se sabe que Jamjóyev mantenía contactos con los seguidores de Doku Umárov, líder de los terroristas del Cáucaso del Norte, quien asumió la responsabilidad por el atentado en el aeropuerto moscovita del 24 de enero.
El 8 de febrero fueron arrestados también los hermanos del terrorista suicida de 20 años, Magomed Yevlóyev. En las manos de Ahmed Yevlóyev, de 16 años, y Fatimá Yevlóyeva, de 22 años (inicialmente se comunicó que también era menor de edad), los especialistas detectaron la presencia de hexógeno, una sustancia explosiva que llevaba encima el terrorista suicida. También se arrestó a Umar Áushev, de 22 años, que igualmente tenía huellas de hexógeno en las manos.
Los tres están acusados de homicidio, terrorismo, posesión ilegal de armas y municiones y elaboración ilegal de armas. Según una de las versiones, poco antes de hacerse estallar en el aeropuerto de Moscú, Magomed Yevlóyev llegó a su pueblo natal, de donde había desaparecido en agosto de 2010, y recibió el explosivo de sus familiares. Se supone que Umar Áushev y los hermanos del terrorista lo acompañaron hasta la estación de autobuses cuando partía a la capital rusa.
El jueves una fuente de la instrucción comunicó que los servicios de seguridad supieron el nombre del terrorista un día después del atentado. Fue identificado por las huellas digitales de la mano mutilada durante la explosión. La prueba de ADN, cuyos resultados confirmaron la identidad del terrorista y fueron hechos públicos el miércoles, ha sido una formalidad. La policía no reveló su nombre para evitar la huida de los otros implicados en la organización del atentado.
La investigación del acto terrorista en Domodédovo sigue y se continúan buscando otros sospechosos que podrían estar vinculados con este cruel atentado.