El conflicto confesional entre cristianos y musulmanes en El Cairo continúa cobrando vidas
Para manifestarse contra la ola de violencia confesional, que ha vuelto a golpear a la capital egipcia, miles de cristianos procedentes de distintos puntos de El Cairo se concentraron la tarde de este domingo frente al edificio de la televisión estatal.
Según las fuentes locales, varias personas armadas comenzaron a disparar contra los manifestantes y causaron diez heridos, la mayoría leves.
Este tiroteo fue precedido por las graves hostilidades que se produjeron la noche del sábado (hora local), cuando un grupo de musulmanes intentó asaltar la iglesia de Santa Mina, en el empobrecido barrio cairota de Imbaba, acusando a los cristianos de la detención de una mujer que se habría convertido al Islam.
Las Fuerzas Armadas egipcias, que gobiernan el país desde la renuncia del presidente Hosni Mubarak, tuvieron que intervenir con materiales antidisturbios para separar a los dos bandos.
Al menos 12 personas murieron y más de 200 resultaron heridas como resultado de este conflicto religioso en el país.
Para evitar que el problema se desborde, el Gobierno ha sostenido una reunión de emergencia y el primer ministro, Esam Sharaf, ha cancelado una gira por los países del Golfo Pérsico.
Las autoridades también han informado que el Ejército ha detenido a 190 hombres y que estos comparecerán ante un tribunal militar por participar en dichos enfrentamientos.
El conflicto entre ambas comunidades religiosas se ha recrudecido tras la revolución egipcia que provocó la caída del presidente Mubarak, el pasado 11 de febrero. El hecho de violencia más grave desde la caída del régimen, tuvo lugar el pasado 8 de marzo, cuando 13 personas murieron en un choque armado que estalló después de que un grupo de cristianos coptos cortara una autopista en la capital para protestar por el incendio de una iglesia.