Un exprisionero sirio del Estado Islámico (EI) ha reconocido al ver las imágenes emitidas por la cadena de televisión Shady Hulwe el calabozo en el que estuvo encarcelado después de que las tropas de Bashar Al Assad recuperaran algunos territorios controlados por el grupo islamista, informa un reportaje del 'Mail Online'.
Se trata del sótano de una fábrica abandonada situada en la ciudad industrial de Sheikh Najjar, en el noroeste de Siria, cerca de Alepo. Entrevistados por el medio británico, cuatro rehenes del EI liberados han relatado que durante los últimos cuatro meses de 2013 vivieron allí en condiciones extremas, pasando hambre y durmiendo subre suelos de hormigón casi en total oscuridad.
Supuestamente en este lugar también permanecieron cautivos los prisioneros extranjeros ejecutados James Foley, Steven Sotloff y David Haines, quienes posteriormente pasaron a manos del yihadista John en Raqqa, Siria.
Además del video, el corresponsal que visitó el lugar también publicó varias imágenes en su cuenta de Facebook mostrando las habitaciones donde presuntamente vivieron los rehenes.
Según el exrehén sirio entrevistado, el EI dividió el sótano de la fábrica en dos secciones. La primera fue convertida en 14 celdas separadas, mientras que la segunda se dividió en 12 celdas y tres habitaciones grandes.