Sobrevivientes de masacre en Siria: "Los extremistas asesinaron a familias enteras"
Los habitantes del pueblo alauita de Al Zara, en la provincia siria de Homs, han revelado a RT detalles de los brutales asesinatos y secuestros que tuvieron lugar el pasado 12 de mayo en la aldea, perpetrados por combatientes de los grupos yihadistas Frente Al Nusra y Ahrar al Sham. Sobre esta última agrupación cabe señalar que finalmente no pasó a integrar la relación de la ONU de formaciones terroristas después de que esta semana EE.UU., Ucrania y otros países bloquearan la propuesta de Rusia de incluirla en la lista.
Ahrar al Sham admite su responsabilidad por el ataque
Ahrar al Sham, que propugna una estricta forma salafista del islam sunita, perpetró el ataque junto con el Frente Al Nusra, una organización terrorista reconocida internacionalmente. El grupo ha admitido su responsabilidad por la acción, pero ha negado que haber maltratado a los que se resistieron.
"Los civiles no fueron atacados. Al contrario, las facciones hicieron gran esfuerzo para proteger a los civiles y tratar a los prisioneros con humanidad", ha comentado los hechos un portavoz de Ahrar al Sham citado por Reuters.
Desgarradores testimonios de los lugareños
Sin embargo, los habitantes del pueblo que dieron sus testimonios a RT en árabe han pintado un cuadro diferente de los hechos, describiendo el ataque contra la aldea como un crimen de guerra.
"Mataron a ancianos, niños y mujeres, tomaron prisioneros. Queremos averiguar qué hicieron con ellos. No sabemos nada", ha confesado Abdou Khalifa, un lugareño que fue herido durante el ataque.
"Llegó gente a nuestro pueblo, la mayoría de ellos eran extranjeros. Por la ropa y el aspecto físico entendimos que no eran sirios. Atacaron nuestro pueblo, muchos fueron asesinados. Mi hermano se encuentra entre los muertos, sus hijos fueron heridos. Mataron a familias enteras", ha afirmado otro habitante del pueblo, Ahmad Muhammad al Qasem.
Los residentes de Al Zara también contaron que los terroristas mataron a ancianos. Munzer Qasem, otro testigo de los acontecimientos, a los que ha tachado de "matanza", señaló: "La familia de Abu Naval murió. Era un hombre de edad y murió junto con sus hijas. Fueron masacradas en su propia casa".
Los aldeanos han señalado que "un montón" de personas murieron o fueron tomadas como rehenes por los asaltantes islamistas. Las cifras que ofrecieron coincidían con las barajadas por la televisión estatal siria y las redes sociales.
Una de las imágenes más espantosas del ataque que circularon en las redes sociales mostraba a los combatientes de Ahrar al Sham de pie encima de varios cadáveres ensangrentados de mujeres. El grupo no negó la veracidad de la fotografía, pero insistió en que las mujeres llevaban armas y murieron en combate.
Estados Unidos se niega a culpar a Ahrar al Sham
El Departamento de Estado de EE.UU. admitió que los asesinatos perpetrados durante la captura de Al Zara eran "inaceptables e incomprensibles", pero se negó culpar a Ahrar al Sham o a condenar claramente la cooperación del grupo con los terroristas del Frente Al Nusra.
El incidente en Al Zara se produce después de que Washington se negara a aceptar la propuesta de Rusia en la ONU de designar a Ahrar al Sham, junto con otro movimiento extremista, Jaish al Islam, como organización terrorista por su ideología radical y cooperación con otros movimientos terroristas inspirados por Al Qaeda.
Si el Consejo de Seguridad de la ONU hubiera aprobado la iniciativa de Rusia, los dos grupos se habrían convertido en objetivos legítimos para los ataques aéreos sirios, rusos y de la coalición encabezada por EE.UU., y serían apartados de las negociaciones en paz en Siria.