Fuentes diplomáticas cercanas al Departamento de Estado de Estados Unidos aseguran que ese país podría exigir a Rusia que cierre uno de sus consulados generales en territorio norteamericano a partir del 1 de septiembre, informa el diario 'Kommersant'.
Washington respondería de esa manera a las últimas sanciones de Moscú, que disminuyó el número de diplomáticos norteamericanos en Rusia, porque no habría percibido esa represalia como una contramedida, sino como una escalada de las sanciones recíprocas que se han impuesto ambas partes.
Rusia tiene consulados generales en Nueva York, San Francisco, Seattle y Houston, mientras que los de EE.UU. se encuentran en San Peterburgo, Ekatirimburgo y Vladivostok. Sin embargo, ese medio no ha precisado a qué sede afectaría esa medida ni si perjudicaría al proceso de obtensión de visados.
Recientemente, el Kremlin y la Casa Blanca mantuvieron negociaciones para abrir un cuarto consulado general estadounidense en territorio ruso, pero después Washington se negó a seguir con el proceso.
A raíz de que el Congreso de EE.UU. aprobara nuevas sanciones contra Rusia, Moscú comunicó a ese país que debía reducir su personal diplomático en tierras rusas hasta 455 personas y desautorizó el uso de unas instalaciones de almacenamiento y de una propiedad de la Embajada estadounidense en su territorio.
El pasado 6 de agosto, el canciller ruso, Serguéi Lavrov, aseguró que el secretario de Estado norteamericano, Rex Tillerson, abordó este asunto cuando se reunieron durante la Cumbre de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático que acogió Manila (Filipinas) y recibió explicaciones al respecto.
Lavrov precisó que Moscú está dispuesto a "normalizar el diálogo" si Washington "abandona el camino de la confrontación" que marca con sus medidas punitivas, como "la retención ilegal desde diciembre del año pasado de inmuebles de nuestra Embajada", que "no podía quedar sin respuesta".