En tierra de nadie: "Turquía quiere detener a los kurdos para ayudar al EI en el norte de Siria"
"Los bombardeos de Turquía sobre territorio sirio son una advertencia a los kurdos para que abandonen sus pretensiones de liberar del Estado Islámico el norte de Siria". Así se expresa en declaraciones a RT el analista político Barzan Iso, que recoge informaciones sobre supuestos civiles heridos en los ataques.
"Las YPG [Unidades de Protección Kurdas] son más fuertes que antes y tienen la capacidad de liberar del Estado Islámico la zona que colinda con Turquía", sostiene Iso. Según el analista, los motivos de las agresivas maniobras turcas no se derivan solo de sus rentables relaciones con los terroristas, sino que también a que los combatientes del EI en el norte de Siria mantienen una "tierra de nadie" muy útil que podría servir a Ankara para una futura "ocupación" del territorio entre Alepo y la frontera turca. "Turquía quiere detener a los kurdos para ayudar al EI en el norte de Siria", subraya el analista.
"No es más que otra señal de que Turquía intervendrá en Siria", asegura. Turquía bombardeó posiciones del Ejército sirio en las provincias de Alepo y de Latakia, así como objetivos kurdos próximos a la pequeña ciudad de Azaz, en el noroeste de Siria. Esto incluye el pueblo de Maranaz y la base aérea de Meneg, reconquistada recientemente después de cuatro años por los yihadistas, según lo registraron las Fuerzas Aéreas rusas.
"Tengo informes de gente del lugar que comunica que muchos civiles han resultado heridos allí, aunque no puedo confirmar ningún dato específico sobre esto", revela el analista. "Desde 2012, la base ha estado bajo control de los grupos Ahrar Al Sham y Frente Al Nusra, amba ramas de Al Qaeda", explica.