"No culpen al pobre Johnny Depp": El odio oculto tras la broma del actor sobre asesinar a Trump

El columnista Michael McCaffrey asegura que la broma que el actor Johnny Depp realizó acerca del asesinato al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, revela el odio y las divisiones que existen en la sociedad de ese país norteamericano.

Para McCaffrey, el comentario de Depp —"¿Cuándo fue la última vez que un actor asesinó a un presidente?"— es una más de la larga lista de "comentarios y acciones inapropiadas realizadas por personajes famosos" contra Trump.

No es el único

Este crítico de cine enumera los casos de la cantante Madonna, que comentó que había pensado muchas veces en "volar la Casa Blanca"; el rapero Snoop Dogg, que grabó un video donde mata a un payaso parecido a Trump; o la humorista Kathy Griffin, que salió en pantalla con una cabeza de plástico llena de sangre cuyo rostro se asemejaba al del inquilino de la Casa Blanca.

A pesar de que "Depp sintió el ánimo violento que reina en el discurso político" y "abrazó sus instintos más oscuros para saciar su desesperado deseo de obtener el amor y la aceptación de su público", en este caso sus comentarios fueron "más irreflexivos" porque tuvieron lugar menos de dos semanas después de que "un lunático de izquierdas" tratara de matar a congresistas del Partido Republicano mientras jugaban al béisbol.

"Las divisiones políticas provocan odio e hipocresía"  

Una encuesta del diario 'The Washington Post' indica que el 45 % de los republicanos odia a los demócratas y el 41 % de sus adversarios políticos sienten lo mismo por ellos. Para Michael McCaffrey, esos porcentajes reflejan que "el odio y la hipocresía" dividen a la sociedad  estadounidense.

Este consultor no apoya a Trump, pero estima que quienes opinan que es grosero o indecente deben dejar de ofrecer resistencia con recursos similares porque "si no puedes cambiar la mentalidad de alguien con tus ideas, no serás capaz de hacerlo con los puños".

Para concluir, Michael McCaffrey cita a Gandhi —"Conquista el corazón de tu enemigo con la verdad y el amor, no con violencia"— y solicita no culpar al "pobre Johnny Depp", sino "a nosotros mismos" por permitir y fomentar "ese discurso de odio" con "nuestro silencio".