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China y Corea del Norte se comprometen a fortalecer sus lazos militares y proveer seguridad en Asia-Pacífico ante tensiones con EE.UU.
Una delegación norcoreana se ha reunido con funcionarios chinos en Pekín mientras Washington mantiene ejercicios militares con Seúl.
Pekín y Pionyang impulsarán su cooperación militar y trabajarán juntos para garantizar la seguridad en la región Asia-Pacífico, afirmó este sábado el general Zhang Youxia, vicepresidente de la Comisión Militar Central de China.
"El Ejército Popular de Liberación chino está listo para trabajar junto con Corea del Norte [...] para fortalecer la comunicación y promover la cooperación y el apoyo mutuo para contribuir a [...] la paz y la estabilidad regionales", cita Xinhua a Zhang.
Esto obedece a un "importante consenso que fue logrado por los líderes de nuestras naciones", añadió el general chino, cuyas declaraciones se producen al culminar una reunión en Pekín con una delegación norcoreana dirigida por el general Kim Su-gil, director del Buró Político General del Ejército Popular de Corea.
"Corea del Norte está listo para fortalecer el aprendizaje mutuo y los intercambios amistosos entre las dos fuerzas armadas en varios ámbitos", afirmó por su parte Kim, subrayando que su país tiene intención de llevar las relaciones bilaterales "a un nivel superior".
Ambas naciones perciben como una amenaza las actividades de EE.UU. en la región. Pionyang, que en estos días ha realizado diversas pruebas de armamento, condena que Washington continúa realizando simulacros militares con Seúl pese a que el presidente Donald Trump se había comprometido a ponerles fin en una de sus cumbres bilaterales con el líder norcoreano, Kim Jong-un.
China, por su lado, califica como "provocativas" las operaciones de 'libertad de navegación' del país norteamericano, que la semana pasada envió un portaviones a través de aguas que Pekín mantiene en disputa con otros estados. También condena que Washington haya decidido "meter la nariz" en los asuntos de Hong Kong, territorio autónomo chino actualmente envuelto en masivas protestas.
Pekín y Pionyang están vinculados por un tratado firmado en 1961 que los compromete a ayudarse mutuamente en caso de un ataque contra sus territorios. Además de sus preocupaciones por las actividades estadounidenses en Asia-Pacífico, ambos países comparten rivales geopolíticos comunes, entre ellos Japón y Corea del Sur.
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