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América Latina sale reforzada de cumbre de la CELAC con "un rol cada vez más sólido"
La cumbre de la CELAC ha demostrado que América Latina no sólo es un enorme mercado, sino también un lugar "muy importante" para hacer inversiones y negocios y para generar políticas y programas de protección social, comenta a RT la doctora en ciencias políticas Lucia Dammert.
América Latina tiene países con niveles de crecimiento "importantísimos" como Perú, Brasil y México, por lo que, evidentemente "hay mucho" que podría aprender Europa en muchos aspectos económicos y políticos, estima Dammert.
"América Latina lo que puede mostrar a Europa -que está afrontando la crisis- es que el crecimiento con desigualdad trae conflictos, y que el crecimiento sin inserción social de las grandes mayorías trae violencia", explica la experta, que matiza: "yo creo que hay un nivel de aprendizaje mutuo".
Para Lucia Dammert los países latinoamericanos tienen "un rol que no es subsidiario", ni es un rol "de acompañamiento de otros países", sino que tiene "un rol cada vez más sólido".
El domingo pasado en la capital chilena se inauguró la segunda cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), a la que asisten representantes de los 33 países miembros, salvo Paraguay, y que se centró en el bloqueo a Cuba, la colonización de las Islas Malvinas y el conflicto entre Bolivia y Chile, entre otros asuntos.
A través de una carta leída por el vicepresidente Nicolás Maduro, Hugo Chávez -que se encuentra hospitalizado en La Habana- llamó a fortalecer la unidad de la región, elogió el proceso de integración regional e indicó la importancia de la cumbre.
Al dar por terminada la cumbre, el presidente de Chile, Sebastián Piñera, manifestó su gran optimismo respecto al futuro de las relaciones entre los países de la región y a los cursos de acción que lograron acordar durante estos dos días de intenso trabajo. "La cumbre que hemos terminado siento que cumplió con todos los objetivos y todas las metas que nos habíamos fijado planteado", dijo.
"América Latina lo que puede mostrar a Europa -que está afrontando la crisis- es que el crecimiento con desigualdad trae conflictos, y que el crecimiento sin inserción social de las grandes mayorías trae violencia", explica la experta, que matiza: "yo creo que hay un nivel de aprendizaje mutuo".
Para Lucia Dammert los países latinoamericanos tienen "un rol que no es subsidiario", ni es un rol "de acompañamiento de otros países", sino que tiene "un rol cada vez más sólido".
El domingo pasado en la capital chilena se inauguró la segunda cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), a la que asisten representantes de los 33 países miembros, salvo Paraguay, y que se centró en el bloqueo a Cuba, la colonización de las Islas Malvinas y el conflicto entre Bolivia y Chile, entre otros asuntos.
A través de una carta leída por el vicepresidente Nicolás Maduro, Hugo Chávez -que se encuentra hospitalizado en La Habana- llamó a fortalecer la unidad de la región, elogió el proceso de integración regional e indicó la importancia de la cumbre.
Al dar por terminada la cumbre, el presidente de Chile, Sebastián Piñera, manifestó su gran optimismo respecto al futuro de las relaciones entre los países de la región y a los cursos de acción que lograron acordar durante estos dos días de intenso trabajo. "La cumbre que hemos terminado siento que cumplió con todos los objetivos y todas las metas que nos habíamos fijado planteado", dijo.
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